
El zoológico de Aalborg, en Dinamarca, desató una fuerte controversia internacional tras solicitar públicamente la donación de mascotas no deseadas para alimentar a sus animales carnívoros, incluidos tigres, leones y linces.
A través de sus redes sociales, el centro especificó que acepta pollos, conejos, cobayas y caballos vivos, los cuales serían sacrificados mediante eutanasia por personal capacitado, con el fin de proporcionar a los depredadores una dieta “natural”.
La subdirectora del zoológico, Pia Nielsen, defendió la práctica argumentando que busca replicar la cadena alimenticia original de estos animales y que lleva años implementándose en el recinto.
Según explicó, alimentar a los carnívoros con presas completas —incluidos huesos y pelo— tiene un valor nutricional y conductual relevante. Además, justificó el procedimiento como una forma de aprovechar animales que ya serían sometidos a eutanasia por otras razones.
En el caso de los caballos, los donadores deben presentar un pasaporte equino y certificar que el animal no ha recibido tratamientos médicos en los 30 días previos. También podrían acceder a beneficios fiscales.
El llamado, que ha sido ampliamente cubierto por medios como BBC y CNN, ha generado intensos debates sobre ética animal, bienestar y el papel de los zoológicos modernos. Mientras algunos sectores lo consideran una medida responsable y natural, otros la califican de inhumana e inaceptable.