
Miles de palestinos siguen abandonando la ciudad de Gaza rumbo al sur del enclave, pese a que los ataques israelíes continúan incluso en zonas calificadas como “humanitarias”.
Según Naciones Unidas, más de 73 mil personas han sido desplazadas desde mediados de agosto, la mayoría por la carretera costera de Al Rashid.
Testimonios de familias advierten que “ningún lugar es seguro”, pues han debido dejar atrás viviendas destruidas y pertenencias, enfrentándose además a los altos costos del transporte.
En menos de una semana, 53 mil personas perdieron su refugio tras la demolición de edificios residenciales.
Desde octubre de 2023, la ofensiva israelí ha causado más de 64 mil muertes palestinas, entre ellas 19 mil niños, lo que diversas organizaciones califican como genocidio.