
Jesús Mora González, dirigente de Morena en Michoacán, afirmó que la llegada de Andrés Manuel López Obrador al poder en 2018 significó un quiebre histórico: la regeneración de la vida pública y el cierre de un ciclo de neoliberalismo que dejó pobreza y desigualdad. El 1º de julio de ese año, aseguró, marcó un antes y un después para millones de mexicanos.
A siete años de ese triunfo, Mora subrayó que el proyecto de transformación logró avances palpables: la reducción de la pobreza, un combate frontal a la corrupción y políticas que privilegiaron a los sectores históricamente marginados. La consigna “Por el bien de todos, primero los pobres” dejó de ser un lema para convertirse en eje de gobierno.
El dirigente señaló que con la presidenta Claudia Sheinbaum se consolidó la continuidad de este proceso. Mencionó la reforma al Poder Judicial, el fortalecimiento de derechos para mujeres e indígenas, y la defensa de la soberanía energética mediante Pemex y la CFE como piezas estratégicas del país.
Además, destacó resultados en seguridad y educación: una disminución del 32% en homicidios dolosos, la creación de 30 nuevas preparatorias y el crecimiento de la Universidad Rosario Castellanos, que ya supera los 77 mil estudiantes. Sumó a ello los programas sociales y la infraestructura en marcha, que denominó “el segundo piso de la Cuarta Transformación”.
