
La tensión entre China y Estados Unidos tomó nuevos niveles luego de que un vocero del Ministerio de Exteriores chino amenazara con “luchar hasta el final” ante lo que considera una escalada de “guerras” por parte de Washington.
La advertencia, publicada en la cuenta de X del portavoz, se produjo tras la confirmación por parte de Estados Unidos de nuevos aranceles a productos chinos, justificados por el gobierno de Donald Trump como una medida para presionar a Pekín en la lucha contra el tráfico de fentanilo.
El gobierno chino califica el problema del fentanilo como una “excusa endeble” y acusa a Estados Unidos de “difamar y echar la culpa a China” en lugar de trabajar en conjunto para abordar el problema.
Argumenta que la disputa comercial “socavará el diálogo y la cooperación antinarcóticos”.
El miércoles, China anunció un aumento del 7.2 % en su presupuesto de defensa para este año, alcanzando aproximadamente los 245 mil millones de dólares.
Pekín justifica el incremento, el segundo más grande del mundo después del de Estados Unidos, como una necesidad para modernizar su ejército y defender sus reclamos territoriales en la región.
Se estima que el gasto real de China en defensa podría ser hasta 40 % mayor, según expertos.