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La legisladora demócrata Melissa Hortman y su esposo fueron asesinados en Minnesota en un acto que las autoridades califican como un ataque con motivación política. La tragedia ocurrió la madrugada del viernes, cuando un individuo se hizo pasar por agente policial para ejecutar el crimen.
El gobernador Tim Walz confirmó que el mismo sospechoso habría disparado también contra el senador John Hoffman y su esposa, quienes permanecen hospitalizados tras ser intervenidos quirúrgicamente.
El atacante, según la policía, vestía un chaleco antibalas, portaba una pistola y una placa falsa de policía.
Durante el operativo, también disparó contra los oficiales que respondieron a la emergencia en la casa de Hortman, logrando escapar en medio del caos.
Las autoridades encontraron en su vehículo un manifiesto y una lista con los nombres de las víctimas, lo que refuerza la hipótesis de que se trató de un ataque premeditado.
Hasta ahora no hay personas detenidas, aunque se ha interrogado a varios posibles implicados. El FBI participa en la investigación en conjunto con agencias estatales y locales.
La fiscal general de Estados Unidos, Pam Bondi, declaró que estos actos no serán tolerados y que se buscará aplicar la máxima pena legal posible al responsable del atentado.
El gobernador Walz hizo un llamado a la unidad y a preservar el debate democrático sin violencia: “No resolvemos nuestras diferencias a punta de pistola”.
