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China se ha convertido en el líder indiscutible en el ámbito de la inteligencia artificial (IA), un estatus que se reafirma de acuerdo con un informe de la consultora estadounidense CB Insights.
Por primera vez desde 2017, el valor económico de las start-ups chinas superó al de sus contrapartes estadounidenses, a pesar de representar solo el 9 % del total de nuevas empresas a nivel mundial.
En 2024, el gigante asiático capturó el 48 % del capital global destinado a empresas innovadoras, en comparación con el 38 % que recibió Estados Unidos.
Su éxito se atribuye a un enfoque agresivo y estratégico del gobierno chino, que ha implementado un ambicioso plan para desarrollar la IA en diversas áreas, desde la agricultura hasta aplicaciones militares.
El informe de PwC proyecta que, para 2030, el PIB global aumentará 14 % gracias a la IA, siendo China la economía más beneficiada con un crecimiento del 26 %, por lo que se espera que el país asiático supere a Estados Unidos en ese sector en apenas diez años.
El dinamismo de las start-ups chinas se refleja también en su actividad de patentes, donde ya superan a Estados Unidos, especialmente en el ámbito del aprendizaje profundo.
Las tecnologías de reconocimiento facial y chips inteligentes están impulsando el crecimiento, con empresas como Megvii y SenseTime alcanzando el estatus de “unicornio”.
El ecosistema de la IA en China no solo está dominado por start-ups, sino también por gigantes tecnológicos como Baidu, Alibaba y Tencent, que ofrecen una amplia gama de servicios relacionados con la IA.
La vasta población conectada a Internet en China proporciona una ventaja en la generación de datos, permitiendo al país producir aproximadamente el 13 % de la información digital a nivel mundial.
Empresas como Huawei, Xiaomi y ZTE están a la vanguardia de esta revolución tecnológica, consolidando aún más la posición de China como líder en inteligencia artificial.
