
El pasado jueves 30 de enero, un trágico accidente automovilístico en Michoacán dejó como saldo la muerte de un niño de 10 años y varios heridos, involucrando a uno de los vehículos que era conducido por Raymundo, hijo de Raymundo López Olvera.
Ante este acontecimiento, el empresario emitió un comunicado público en el que lamentó profundamente el incidente y ofreció sus condolencias a la familia afectada. Además, pidió una disculpa sincera por el impacto causado por el hecho.
López señaló que desde el primer momento, su familia ha colaborado plenamente con las autoridades para esclarecer las circunstancias del accidente.
Según el comunicado, las pruebas y peritajes correspondientes fueron realizados en el lugar de los hechos, y la familia López se comprometió a no evadir ninguna responsabilidad.
“No evadiremos jamás responsabilidad alguna”, expresó Raymundo López en su declaración, destacando que su disposición para cooperar con las autoridades ha sido constante.
En cuanto a la relación con la familia del niño fallecido, el comunicado aseguró que se ha mantenido una comunicación constante con los representantes legales de la víctima.
También se informó que el 5 de febrero se firmó un acuerdo reparatorio que resolvió el asunto legal, dando por terminada toda acción judicial relacionada con el accidente.
Aunque inicialmente evitaron realizar una declaración pública, el desarrollo de los acontecimientos y la necesidad de aclarar la situación llevaron a la familia López a emitir este pronunciamiento.
Finalmente, Raymundo López destacó el compromiso de su familia con el bienestar de la comunidad y de Michoacán.
Aseguró que el trágico incidente ha dejado una lección dolorosa que asumen con humildad y responsabilidad.
También pidió respeto y comprensión por parte de la sociedad, reiterando su compromiso de seguir acompañando a la familia afectada por la pérdida de su ser querido.