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Un grupo de 18 estados con gobiernos demócratas presentó este martes una demanda contra el presidente Donald Trump, en respuesta a su intento de eliminar la ciudadanía por nacimiento en Estados Unidos mediante una orden ejecutiva.
El texto de la demanda argumenta que el decreto es “ilegal” y viola la Constitución, específicamente la Enmienda 14, que garantiza la nacionalidad automática a toda persona nacida en territorio estadounidense, sin importar el estatus migratorio de sus padres.
El decreto, firmado por Trump poco después de asumir el cargo, establece que los hijos de padres indocumentados o con estatus legal temporal no podrán obtener la ciudadanía.
Los estados demandantes, que incluyen Nueva York, Colorado y California, sostienen que el presidente “no tiene autoridad para reescribir o anular una enmienda constitucional”, y advierten que la implementación de esta medida causaría un daño “inmediato e irreparable” a los residentes en sus jurisdicciones.
La eliminación de la ciudadanía por derecho de nacimiento complicaría la emisión de pasaportes y el reconocimiento de derechos básicos para los niños nacidos de padres indocumentados, afectando su capacidad para trabajar legalmente en el país.
Aunque esa demanda ha sido un tema recurrente entre grupos conservadores, Trump no logró revocar ese derecho durante su primer mandato.
Para modificar la ciudadanía por nacimiento, se requeriría una enmienda constitucional, un proceso que implica la aprobación de dos tercios en ambas cámaras del Congreso y la ratificación por tres cuartas partes de los estados.
De acuerdo con datos de Pew, en 2022 había aproximadamente 1.3 millones de adultos estadounidenses cuyos padres carecían de estatus legal.
