
La propuesta para reformar la Constitución de Michoacán y garantizar la alternancia de género en la gubernatura ha logrado algo más que abrir el debate: ha revelado con claridad el machismo que persiste entre quienes, con discursos huecos, dicen estar a favor de las mujeres, pero que en los hechos se niegan a dejar que ocupemos cargos de poder y decisión, así lo declaró Ale Anguiano, secretaria de Igualdad Sustantiva y Desarrollo de las Mujeres Michoacanas.
“La sola mención de la alternancia puso nerviosos a muchos. Escuchamos frases como ‘las mujeres no necesitamos que nos den un lugar en la silla’, que no toman en cuenta que en más de 200 años de historia en Michoacán, ninguna mujer ha ocupado esa silla. Eso no es mérito, es monopolio patriarcal. Negarse a abrir la puerta a las mujeres no es defender la democracia, es defender el privilegio”, afirmó.
Ale Anguiano fue enfática al señalar que la violencia política que se presenció en el Pleno este martes, dirigida incluso a diputadas que apoyaron la propuesta, confirma que la resistencia no es jurídica, sino ideológica.
“Lo que esta iniciativa dejó claro es que hay bancadas que presumen paridad en el discurso, pero cuando se trata de ceder poder real, el machismo les sale sin filtro. Y eso no podemos normalizarlo.”
A quienes aseguran que la paridad ya está garantizada, Ale Anguiano les recordó que la ley no es un adorno para discursos bonitos: “La alternancia es una medida que va al fondo. Desmonta pactos masculinos que no se tocan solos. Se rompen con voluntad política.”
Y fue más allá: “Es especialmente preocupante ver a mujeres que, beneficiadas por el avance de los derechos políticos, hoy den la espalda a la lucha que les abrió el camino. Oponerse a la alternancia es traicionar esa historia que hizo posible que hoy ocupen esos espacios.”
La alternancia de género no pretende frenar ninguna aspiración política, sino garantizar que la gubernatura no siga siendo un territorio exclusivo de hombres.
“Guerrero, Estado de México, Guanajuato y Colima ya son gobernados por mujeres. Colima lo logró hace 50 años. ¿Cómo es posible que en Michoacán todavía estemos debatiendo esto?”, cuestionó.
Ale Anguiano dejó claro que, “la ciudadanía está lista para una gobernadora, lo dicen todas las encuestas. Es momento de escuchar al pueblo y de actuar en consecuencia.
La alternancia no es una amenaza: es una promesa para que las niñas michoacanas puedan soñar, por fin, con ser gobernadoras.”, concluyó.