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El gobernador de Michoacán, Alfredo Ramírez Bedolla, expresó su preocupación por las consecuencias que la imposición de aranceles del 25 % por parte de Estados Unidos a productos mexicanos y canadienses tendrá sobre las cadenas de suministro en América del Norte.
En su declaración, el mandatario destacó que estas medidas perjudicarán principalmente a los ciudadanos estadounidenses, quienes serán los más afectados por el aumento de precios en bienes producidos en México y exportados a Estados Unidos, generando un impacto negativo en su poder adquisitivo.
Ramírez Bedolla advirtió que la decisión unilateral del gobierno de Donald Trump vulnera los acuerdos establecidos en el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) y afecta la confianza en la inversión, lo que a su vez perjudica el bienestar de más de 500 millones de personas que habitan en América del Norte.
Según el gobernador, los productos mexicanos representan más del 15 % del Producto Interno Bruto (PIB) de Estados Unidos, y la aplicación de aranceles incrementaría la inflación estadounidense en al menos 3.75 puntos porcentuales, duplicando de manera abrupta los costos para los consumidores en ese país.
El gobernador michoacano detalló que los principales productos afectados serían partes y accesorios para automóviles, equipos de cómputo, productos electrónicos, maquinaria, equipos médicos, alimentos y productos agrícolas como el aguacate, que tienen una gran demanda en el mercado estadounidense.
Además, subrayó que este tipo de medidas dañan la competitividad económica, inhiben la inversión y deterioran las relaciones comerciales entre los países.
A pesar de ello, Ramírez Bedolla reiteró su respaldo a la estrategia económica del gobierno de México y expresó su confianza en que estas medidas serán pronto reconsideradas, confiando en la fortaleza y solidez de la economía mexicana.
“Ratificamos nuestro respaldo y apoyo a nuestra presidenta”, concluyó.
