
Terry Gene Bollea, conocido mundialmente como Hulk Hogan, falleció este jueves a los 71 años en su residencia de Clearwater, Florida, debido a un paro cardíaco.
Su deceso ha conmocionado tanto al mundo del deporte como a la cultura popular, pues Hogan fue una figura emblemática no sólo de la lucha libre profesional, sino de toda una generación.
Con más de una docena de títulos mundiales y participaciones memorables en WrestleMania, Hogan se consolidó como uno de los pilares de la WWE durante los años ochenta y noventa.
Además de su carrera en el ring, Hogan incursionó en el cine, la televisión y la música, y fue una figura constante en campañas publicitarias.
También participó activamente en causas conservadoras en Estados Unidos y tuvo acercamientos con figuras políticas, incluyendo al expresidente Donald Trump.
En años recientes enfrentó problemas de salud derivados de múltiples cirugías, especialmente en la espalda y el cuello, así como controversias legales por grabaciones privadas filtradas.
Su muerte ocurre mientras se recuperaba de una reciente operación. Luchadores, celebridades y fanáticos de distintas partes del mundo han expresado condolencias y recuerdos, destacando su carisma inigualable y su impacto como símbolo del entretenimiento deportivo.
Hogan deja un legado difícil de igualar, tanto por su impacto atlético como por su presencia mediática.