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La presidenta de la Junta de Coordinación Política en el Congreso del Estado, Fabiola Alanís Sámano, señaló que la reciente reforma al Poder Judicial tendrá un impacto directo en la vida de las mujeres y sus hijos e hijas, ya que la justicia en el país sigue estando mayormente al alcance de quienes pueden permitírsela, una condición que excluye a la gran mayoría de las mujeres.
Según Alanís, muchas veces son estas mujeres las que enfrentan mayores obstáculos para acceder a un sistema de justicia que, en la mayoría de los casos, se muestra ineficaz y parcial, especialmente en situaciones de divorcio y violencia vicaria.
La legisladora, con varias décadas de experiencia en la lucha por los derechos de las mujeres, lamentó que en casos de divorcio y disputas por la custodia de los hijos, las mujeres se ven desprotegidas, mientras que los hombres, si cuentan con influencia o recursos económicos, pueden comprar la voluntad de los jueces, dejándolas en una situación de desventaja.
En este contexto, Alanís destacó que la impunidad es uno de los problemas más graves del sistema judicial, ya que, de acuerdo con el propio Poder Judicial, un 97% de los casos no se resuelven, siendo las mujeres y sus hijos e hijas los más afectados por la falta de justicia en temas como guarda y custodia, pensión alimenticia y violencia de género.
La especialista en políticas públicas con enfoque de género subrayó que esta reforma al Poder Judicial no solo afecta a las mujeres, sino a toda la sociedad mexicana, ya que implica un cambio fundamental en la manera en que se administra la justicia.
En ese sentido, recordó que Michoacán fue la primera entidad en impulsar una reforma de este tipo, permitiendo que la elección de los responsables de administrar la justicia se haga mediante un proceso popular, lo que representa un avance importante hacia un sistema judicial más accesible, equitativo y justo para todos los ciudadanos.
